No ha pasado ni una semana desde su anuncio y ya ha aparecido la primera polémica con Assassin’s Creed 4: Black Flag.
Esta misma situación ya se vivió con la mayoría de juegos anteriores, ya sea por temas religiosos, patrióticos, esclavitud o de derechos de autor.
Esta vez, el turno es para los animales, y es que la polémica viene a raíz de esta imágen.
Al parecer, en Assassin’s Creed 4: Black Flag, al igual que en la tercera entrega, se podrán cazar animales, y cómo el nuevo juego trata de piratas, los animales que cazaremos serán del mar, y podremos cazar ballenas.
Esto lo ha criticado la organización de defensa de animales PETA.
“La caza de ballenas, esto es, disparar arpones y dejar que mueran en una hora o más, o cortarlas mientras siguen vivas, es una práctica que puede extraerse de los libros de historia; pero esta sangrienta industria ballenera continúa hoy bajo la condena internacional, y por tanto es una desgracia para cualquier juego glorificarla”, afirman desde esta organización de defensa de animales.
“PETA alienta a las compañías de videojuegos a crear títulos que celebren la naturaleza, no que promuevan la caza y la matanza”, concluyen.