Ocupación: Pirata
Nacimiento: 10 de marzo de 1693, Swansea, Gales
Nacionalidad: Galés
Alianzas: Piratas, Assassins
Navíos asociados: Jackdaw
El valiente e impulsivo Edward Kenway quizá sea el protagonista de mayor complejidad emocional que hayamos visto en toda la saga de Assassin’s Creed. Soñaba con vivir grandes aventuras desde su infancia en una granja, sin pararse a pensar demasiado en las consecuencias. A pesar de disfrutar al máximo de todos los placeres materiales, en comparación, la vida personal de Edward está relativamente vacía: un matrimonio fallido con su amor de juventud, Caroline, fue la primera muestra de ello.
No obstante, Edward también es atento y reflexivo –aunque algunos dirían que cizañero– y poco después de abrirse paso hasta las Indias Occidentales (como eran conocidas entonces), tiene claro su futuro. Al servir bebidas a los piratas en Nasáu, Edward se da cuenta de que su encanto y su ingenio pueden llevarlo lejos.
Edward se convierte en un hombre que valora a la gente importante y con buenas conexiones. Prospera como el carismático capitán de su propio barco, el Jackdaw, y se gana el respeto de camaradas como el mismísimo Barbanegra.
Ser el centro de atención en animadas celebraciones y borracheras es un papel que sienta bien a Edward, al igual que la rudeza y la agilidad que caracterizan a los piratas de verdad. Sin embargo, encontrarse de repente en medio de una antigua guerra entre Assassins y Templarios será lo que realmente ponga a prueba su fortaleza de carácter.