Análisis Assassin’s Creed Chronicles Russia

Assassin’s Creed Chronicles cierra su trilogía con Assassin’s Creed Chronicles Russia, tras visitar China y la India, esta última entrega nos traslada a Rusia en el periodo de la Revolución de 1918 con el Asesino Nikolai Orelov, protagonista de los comics The Fall y The Chain. En este último título de la trilogía, algunas cosas se han cambiado y otras se han mantenido, donde Climax Studio, desarrollador de los tres juegos, ha acertado en algunos aspectos y errado en otros que se detallarán a lo largo del análisis.

Historia

Rusia, 1918, los bolcheviques se han alzado y derrocado al último Zar del imperio, Nikolai está planeando abandonar su tierra natal y a la Hermandad Rusa para viajar a Estados Unidos con su familia. Para conseguir el dinero necesario para el viaje, acepta una última misión, recuperar la misteriosa caja de Ezio que está en poder del Zar antes que los Templarios.

Durante la misión, Nikolai no consigue llegar a tiempo y los Templarios capturan al Zar y sus hijos, a los que asesinan por no darles la caja, pero, Anastasia, una de las hijas del Zar, consigue escapar con la caja y en el momento en que está rodeada y a punto de morir, Nikolai le salva la vida y decide cambiar el cometido de su misión, escoltará y protegerá a Anastasia hasta ponerla a salvo, de la que descubrirá que tiene unos poderes sobrenaturales.

Jugabilidad

Como en las anteriores entregas, este juego es un plataformas de sigilo en 2.5D, el personaje se moverá lateralmente y cambiará de plano frecuentemente, los enemigos tienen un cono de visión en el que detectarán al protagonista y debido a la dificultad del combate, se deberá evitar. Mientras que en las dos anteriores entregas se explicaban los controles del combate, que aunque complicado, en ciertos casos era necesario, en Russia no se da ninguna pauta para combatir, por lo que será necesario el ensayo error si no has jugado a China o India.

Los movimientos del personaje son muy fluidos e intuitivos, y en este caso, sí se explicarán los controles al comienzo de la aventura, no faltará el parkour y los saltos típicos de los Asesinos, ni las habilidades Helix que se introdujeron en las anteriores entregas de Chronicles que permitirán ocultarse, hacer desaparecer cuerpos de enemigos o teletransportarse de un escondite a otro.

Continuarán las fases de francotirador que se introdujeron en India, pero en Russia cobrarán más importancia, en numerosas ocasiones Nikolai deberá cubrir a Anastasia con su rifle para que pueda continuar. Además del fusil, Nikolai estará equipado con las usuales bombas de humo y, otra novedad, un cabestrante, que sustituirá al dardo cuerda, que servirá para escalar a los techos o dispararlo a objetos para acercarlos o a las cajas eléctricas para provocarles un cortocircuito y apagar las luces.

Característico de la trilogía es la dificultad del las fases, en las que se tendrá que repetir frecuentemente varias partes porque los guardias descubran el protagonista o le eliminen, en Russia esta dificultad se ve agravada en ciertos momentos que llevarán al jugador a la desesperación, ya que la posición de los guardias hace imposible no ser descubierto o en las partes de carrera, que si no se hacen los movimientos al milímetro, el personaje morirá. Estas partes son un gran error, ya que obligan al jugador a realizar una serie de movimientos o asesinatos sin darle libertad, ni de movimientos ni de elección. Aunque estas partes de alguna fase son las menores, el resto se tendrá la posibilidad de elegir como hacerla, Oculto (sin que los guardias descubran al personaje), Asesino (si se decide asesinar algún guardia) o Silenciador (si se les incapacita).

Ubisoft se guardaba un as en la manga sobre este título, y era que se controlaría a dos personajes, además de a Nikolai se podrá controlar a Anastasia, que no podrá combatir ni tendrá armas, salvo una pequeña daga y un dardo cuerda para asesinatos sigilosos, pero podrá utilizar las habilidades de Helix, mientras que Nikolai no podrá utilizarlas, pero tendrá sus armas para defenderse.

Apartado Gráfico

Graficamente, el juego luce con un estilo cómic, parecido a The Fall, con colores en banco y negro unidos con rojo en los objetos destacados, que cierra la trilogía con los tres juegos con un estilo muy diferente, China con trazos tipo tinta china, India con mucho colorido, y Russia con blanco, negro y rojo, muy propio de inicios del siglo 20 con la revolución industrial y el rojo como color característico de la Revolución Rusa.

Las escenas son de imágenes estáticas con pequeños movimientos, tipo motion comic, como en las dos entregas anteriores.

A pesar de ser bonito, no exprime para nada las capacidades de la consola, pudiendo haberse lanzado tanto en las consolas de la pasada generación como hasta en 3DS (curioso que juegue tanto con la profundidad de los escenarios y no se haya aprovechado para sacarlo en esta consola), Ubisoft no se olvida de PSVita, y sacará la trilogía en la portátil en las próximas semanas.

Apartado sonoro

La franquicia Assassin’s Creed nunca se ha caracterizado por tener unas bandas sonoras excelentes salvo en algún caso muy aislado, y Assassin’s Creed Chronicles Russia tampoco destaca con su música, cumple sin más y da ambiente a los escenarios, aunque a veces será como si no se escuchara.

El doblaje deja mucho que desear, que sólo estará disponible en inglés, sólo destaca Nikolai con una interpretación excelente, sin embargo, Anastasia en ningún momento parece rusa, si no inglesa, y los guardias y demás personajes no jugables tendrán el mismo tinte, un gran error con respecto al primer título de la trilogía donde se podían escuchar a los guardias en chino muchas veces.

Extras

Como en el anterior título, se ha añadido las fases de Desafío para alargar un poco la vida de Russia, donde habrá que recoger coleccionables o eliminar al objetivo en un tiempo limitado.

Además de este modo, habrá un apartado de códigos, donde habrá que introducir los códigos que se han estado viendo con la vista de águila a lo largo de China, India y Russia para desbloquear una escena en el presente que os mostramos a continuación.

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Conclusión

La trilogía Assassin’s Creed Chronicles termina en Russia con un título que no destaca sobre sus dos anteriores, con cambios acertados y otros errados, pero cumple perfectamente como un juego menor de la franquicia. Sirve como cierre de qué ocurrió con la caja de los Precursores que Ezio dio a Shao Jun que los fans se llevan preguntando desde 2011, además de revelar algunos de sus misterios, pero no todos. Con una dificultad muy elevada, unas veces hará al jugador romperse la cabeza para pensar como terminar una parte de la fase y otras rompérsela literalmente de desesperación por lo milimétrico de su dificultad. Una pena que, visto cómo es gráficamente, no se haya llevado a otras plataformas para que más usuarios puedan disfrutarlo, y que un gran personaje como Nikolai se haya quedado relegado a un juego menor.

Sin duda a los fans de la franquicia les encatará, por ver a Nikolai, y a los seguidores de las plataformas o el sigilo también, ya que es un gran desafío completar las fases con la mayor puntuación.